Doble Filo como el de la Canción

Creo que esta vez no soy yo, no es esa vocecilla interna...Pienso que es la realidad abofeteándome. Se agradece.
De entre todo lo que fue, lo que nunca creí está asomando...
Dejó de sorprenderme hace tiempo, y eso me repatea, las monedas caídas ya no me traen duendes y ahora en ocasiones hasta me molestan, y sin poder controlar el incesante goteo, antaño agradable; ahora me dan ganas de remendarle el jodido bolsillo a ver si se deja de intentos vanos.
No descubriendo se descubre lentamente, que cada vez más me retracto y me condeno por ser tan necia de hacerme daño; y que tal vez lo que asoma sea el cansancio de aquella vieja batalla interna sin sentido; la victoria del "nunca debí encumbrarlo..."

Trastero Amargo

Últimamente todo es caos, estoy desconectada de lo que solía ser mi mundo y me importa tres cojones, sin embargo no acabo de estar cómoda...y es que, contrariamente a lo que pudiese pensar, estoy bastante descentrada, no tener punto de apoyo me descoloca, cualquiera diría que mi vida era más estable antes...

Puestos a sucumbir al caos...¿por qué no hacerlo definitivo y mandarlo todo a la mierda? Estoy deseando largarme, nada de Erasmus ni esas polladas, largarme de verdad, sin contacto con nadie, sin los rutinarios ¿qué tal va todo? ¿qué tal lo pasas?, sin que nadie supiera donde estoy, sin redes sociales, sin nada de esas superficialidades...Que sólo lo supieran en mi casa, por si a la desesperada me doy cuenta de que he cometido un error y necesito contacto con alguien cercano, la familia es el vínculo que siempre te queda y el nido al que casi siempre puedes volver...(al menos mi familia)

Por eso tengo tantas ganas de estar en casa estos días...es mi único ancla en este torbellino que ni siquiera me va a aportar nada interesante, de momento sólo mareos y nauseas...¡Y mira que el ancla está oxidada!

Ni siquiera estoy en paz "a mi bola" ¡qué va! sólo me parece todo deprimente...Tal vez me arrepienta de esto; pero...¡prefiero mis rayadas de antes! en las que pensaba que tenía demasiadas conexiones, que me preocupaba demasiado por mis relaciones y por todos los que me rodeaban...Ahora al fin y al cabo, la mierda sigue ahí, rozándome...Y me dedico a mirarla con indiferencia, ya no seré yo la que vaya a limpiarla...que pocos vienen a recoger la mía...tampoco es que necesite ni quiera más que los justos.

Qué terrible es esta perspectiva, de verdad...qué triste sentir que estás de paso en todo, TODO; menos en tus raíces,claro...

Creo que ya no me dan pena las despedidas, sólo nostalgia; y una sensación amarga al sentir que cada vez todo me va importando menos porque al fin y al cabo, nada es para siempre y por lo que veo, desde luego yo, voy a salir volando en cualquier momento de muchas vidas, sin pena ni gloria.